Olvidarte de vos, es una cuota de interes muy caros.

 Compromiso, entregas, intentar y volver a intentar.

Viajar por estar con el otro, apoyar en carpas y paseos.

Admirar, salir del ego, romper cáscaras y carcazas blindadas.

Enfrentar problemas. Enfrentarte.

Quedarte en la comodidad de un mundo

donde la indiferencia y el universo solucionan todo.

El despecho surge por los poros, palabras injustas que acusan abandono.

 Irte, tantas veces te fuiste.

De los proyectos, deseos, conflictos y momentos.

Siempre una bandera ajena, una mirada de afuera, sacaban el espíritu,

y lo llevaban etéreo por los aires y los kilómetros...

Abandonar tu magia.

Tomar la forma de una piedra en la mochila, disfrazada de tótem,

pretende dar energía, sólo es peso e hipocresía.

Ahogar la libertad, callar el instinto, y volver todo caprichos.

Comercio entre entregas y esperas.

 

Pertenecer Te

Sostenerte en un silencio, apagarte adentro.

Mecanismos entre ser la víctima y

Ser tu propio verdugo.

Un corte, un poquito de cobardía que toma forma de coraje

Tira todo a la vereda.

Don Ego grita el abandono.

Más allá de los hechos, las justificaciones, las razones, los 50% - 50% y lo que hubiera o no… bah, el papel de víctima llevaba la ventaja.

Sacarte la máscara.

Reconocer.

La libertad, lo que estaba adentro, las valijas llenas de los deseos de Ser,

de bridarte sin explicaciones, justificaciones, deudas o tratos.

Petencer – me.

Comentarios